Chile

Cazadores Paleoindios del Extremo Sur de Chile

  • Ambiente y Localización

    Fueron los primeros pobladores de la Patagonia chileno-argentina, en el extremo sur del continente americano, viviendo bajo las exigentes condiciones subantárticas. El derretimiento de los hielos pleistocénicos abrió rutas migratorias favorecidas por un nivel del mar más bajo que el actual, a la vez que generó ríos y lagos. El dominio de un clima cálido-seco permitió la formación de la vegetación estepárica y la de bosque abierto, que fueron propicias para la alimentación de diversos herbívoros, tanto extintos como modernos.

  • Economía

    Cazaron algunos grandes herbívoros que se extinguieron a fines del Pleistoceno, (megafauna) como caballos americanos, paleolamas y milodones, aunque el guanaco fue siempre la base de su dieta. La cacería implicaba una coordinación entre un grupo grande de personas, ya que ocupaban técnicas colectivas de encierro y arrinconamiento, para luego herir a sus presas con boleadoras y dardos provistos de las características puntas en forma de “cola de pescado”, propulsados con estólica. También cazaban ñandúes, aves y roedores y recolectaban algunos productos vegetales. Su economía tenía un énfasis marcadamente terrestre y hasta ahora no se conoce que explotaran los recursos marinos. Constituían grupos sumamente móviles y la baja demografía les permitía desplazarse libremente por amplios territorios.

  • Arte

    Los pobladores de la Patagonia plasmaron parte de su cosmovisión en los muros de los aleros rocosos que habitaban, evidenciando una alta complejidad ideológica. Las representaciones más comunes eran las “pinturas de manos”, que lograban colocando sus manos sobre la roca y soplando el pigmento con fuerza para plasmar su negativo. Pese a su simplicidad, los colores de estas pinturas también cambiaron en el tiempo y si bien los más comunes eran los pigmentos rojo, negro y blanco, en algunos sectores se incorporó el uso de amarillo y hasta de verde. Además, pintaron escenas con guanacos, en las que representaban sus técnicas de caza colectiva y también animales estáticos, exagerando las partes relativas a la fecundidad y a la grasa, alimento especialmente apetecido.

  • Organización Social

    Se organizaban en grupos familiares pequeños sin jerarquías sociales, aunque probablemente ciertos individuos lograban prestigio y autoridad en la toma de decisiones basándose en su experiencia o sus habilidades. Estos grupos mantenían relaciones sociales y de cooperación entre sí y, de vez en cuando, se organizaban para realizar las labores de caza colectiva, las que requerían un número importante de personas.

  • Culto y Funebria

    En muchos sitios ocupados por estos cazadores paleoindios se han hallado “litos discoidales”, discos de piedra de formas geométricas finamente trabajados y sin huellas de haber sido usados como instrumentos. No sabemos exactamente qué rol jugaban en la temprana cosmología paleoindia, pero es claro que desempeñaron una función ritual. Los pigmentos rojos y ocres eran comúnmente usados también en ritos ceremoniales y mortuorios. Aunque es poco lo que se sabe de sus tradiciones funerarias, es probable que ya en estos tempranos tiempos se iniciara la costumbre de cubrir a los difuntos con piedras o de cremar sus cuerpos.

  • Patrón de Asentamiento

    Estas primeras poblaciones patagónicas eran muy móviles y se desplazaban libremente por cientos de kilómetros, aprovechando tanto los ambientes de bosque abierto como el territorio estepárico. Ocuparon una y otra vez los mismos abrigos rocosos como refugio, algunos de los cuales habitaron de forma más estable, aprovechando el espacio para la realización de diversas tareas, mientras que otros fueron usados sólo por cortas estadías.

  • Historia

    Las evidencias de sitios paleoindios en la Patagonia apuntan a que el poblamiento austral se realizó desde el oriente, por el territorio argentino o quizás por la costa del Atlántico, que entonces tenía el nivel del mar mucho más bajo que hoy. La colonización de estas tierras demandó una adaptación cultural a los ambientes boscosos y estepáricos, pero llama la atención que estos grupos no hayan explotado los ricos recursos marinos tan abundantes en la región. Uno de los instrumentos de piedra más típicos era la punta de proyectil “cola de pescado”, llamada así por la forma de su base, que era amarrada al astil del propulsor o estólica, y que se ha encontrado en muchos otros sitios de esta época en Sudamérica. En el ámbito ritual, la presencia de los litos discoidales sugiere relaciones culturales con otras poblaciones que ocuparon la costa del Pacífico sudamericano en tiempos relativamente contemporáneos, como el Complejo Huentelauquén en el norte y centro de Chile o el Complejo Las Vegas en Ecuador. Las similitudes en ambos artefactos nos permiten sugerir alguna conexión o sustrato cultural común entre estas antiguas poblaciones que ingresaron a Sudamérica desde Norteamérica.

Ubicación

Período