El Señor de los Camélidos
La relación entre llamas y pastores se expresa en un personaje mitad hombre, mitad animal, que parece ser un espíritu vinculado con la fertilidad de las llamas, los manantiales y la lluvia.
Este ser sobrenatural suele representarse de pie o sentado, vestido con una túnica o faldellín y rayos en la cabeza. Por lo general, tiene sus manos y pies divididos, emulando las características patas partidas de los camélidos. Su imagen es frecuente en el arte rupestre de la región y también en objetos portátiles como los textiles y la cestería.