Los pueblos Vergel mantuvieron una economía de amplio espectro donde la caza y la recolección, tanto terrestre como acuática (fluvial, lacustre y marina), complementaban sus actividades agrícolas. Cultivaron papas, quínoa, maíz, porotos y zapallo. De manera excepcional manejaron al guanaco en un estado de semi domesticación por medio del amansamiento de crías silvestres, el llamado chilihueque que describen los primeros españoles. Cazaron lobos marinos, pudúes, zorros, nutrias, coipos, ranas y aves acuáticas, practicaron la pesca principalmente de orilla y recolectaron moluscos y vegetales como la totora, frutillas silvestres y los frutos del peumo.