Vitrina ‘Historia de los inkas’..
Toqapu ‘ajedrezado’ en túnica utilizada por el ejército inka. Tejido de tapicería, fibra de camélido. Imperio Inka, Andes Centrales del Perú, 1400-1532 d.C. Colección MNAAHP-Ministerio de Cultura de Perú, RT-002377 (860 x 740 mm).
Miniatura de túnica (unku) con toqapu ‘ajedrezado’ en conjunto de ofrenda ritual. Textil, plata, plumas. Imperio Inka, Andes Centrales del Perú 1400-1532 d.C. Colección Museo de Colchagua, PE-MCOL 09 (110 mm, alto).
Personajes con túnicas de toqapus ‘ajedrezados’. Fuente de cerámica. Diaguita-Imperio Inka, Norte de Chile, 1400-1532 d.C. Colección Museo Arqueológico de La Serena, Chile (200 x 250 mm).
Toqapu ‘ajedrezado’ que representa al usado por el ejército inkaico. Bolsa (wayaja), textil. Inka-Tarapacá, norte de Chile, 1400-1532 d.C. Colección Museo Chileno de Arte Precolombino, 2736 (202 x 107 mm).
La guerra contra pueblos selváticos (Antis). Vaso quero de madera policromado. Colonial, Perú, Siglos XVI-XVIII. Colección particular, PE-PLE 03 (213 x 170 mm).
Cuando los inkas narran ‘visualmente’ sus conquistas, se representan a sí mismos vestidos con unkus o túnicas con diseños ajedrezados, pues eran el emblema de su poder militar. A los grupos étnicos subyugados los caracterizaban por sus trajes, o por sus tipos de armas y por los lugares, animales y plantas donde habitaban. Uno de los pueblos dominados más ilustrados son los antis, habitantes de la selva o ‘Antisuyu’, quienes visten largas camisas moteadas que parecen de piel de felino, tienen pelo largo, usan tocados con plumas, llevan pintura facial y andan descalzos, portando arco y flecha o con mazas en sus manos. Siempre están combatiendo con soldados inkaicos, siendo derrotados o llevados como prisioneros.